Brief incoming.
¿Qué harías si te llegara esto a la bandeja de entrada?

Marca: Conservas Emilia
Sector: Conservas de pescado artesanales (sí, pero no las de tu abuela… o quizá sí, pero con actitud).
Web: conservasemilia.com

Objetivo:
Convertirse en la marca de conservas que no solo vende latas, sino que cuenta historias reales. Familia, mar, raíces y ese punto de desmadre que separa lo auténtico de lo cursi. Ser diferentes sin gritarlo, ser de verdad sin disfraz de “marca joven”.

Audiencia:
Gen Z (18-28 años).
Gente que huele el postureo a kilómetros. Quieren marcas con alma, historia y cero miedo al humor o la ironía.

Propuesta de valor: Conservas Emilia: tradición familiar con sabor que habla por sí mismo. Historias de mar, familia y raíces… sin filtros, directo a tu mesa.

Y aquí viene la parte divertida:
El hijo del CEO ya sabe cómo hacerlo. Y sí, ya se ha puesto manos a la obra. 

La mente creativa detrás de esta estrategia @logan.kartier

@logan.kartier es la mente creativa detrás de esta pedazo de estrategia en TikTok. No lo conocía, pero haciendo un poco de scroll (vale, bastante), descubrí que es un creador de contenido centrado sobre todo en moda: mucho “outfit of the day check”, buen gusto, tono cercano y una edición de vídeo muy guay. 

Hasta que un día, imagino, se le encendió la bombilla y dijo: “vamos a darle vidilla al negocio familiar”. ¿Qué podía salir mal? Pues nada, porque si algo tiene claro Logan es cómo generar comunidad: más de tres millones de me gusta en TikTok lo demuestran. Así que vamos a ver qué ha hecho tan bien:

1. Naturalidad a tope. Aquí los fallos no se tapan, se aprovechan. El primer vídeo tuvo una falta de ortografía y… ¿qué hizo Logan? Borrarlo y contarlo. Resultado: un vídeo graciosísimo y súper real. Las risas, las caras, las reacciones del equipo… oro puro. Eso conecta, porque la gente quiere ver personas, no marcas perfectas.
2. No se esconden. El equipo sabe mucho de conservas, pero de hablar a cámara… cero patatero. ¿Solución? Mostrarlo. Logan les marca el guion, se ríen, se equivocan y lo dejan todo. Sin filtros, sin cortes. "Me ha quedado cutre, pero quiero que sea cutre". Esa es la magia: son así, y la gente lo nota.
3. Se enseña todo. Desde el café del break hasta el jefe llegando en patinete. Y de repente, ¡pum!, un “corte publicitario” para enseñar las latas. Puro humor, pero te acuerdas del producto. Eso sí que es marketing con guasa.
4. Siempre la misma intro. Todos los vídeos empiezan igual: "Bienvenidos a Conservas Emilia, una empresa familiar especializada en la elaboración artesanal de conservas de pescado, situada en Santoña, Cantabria. Y nosotros somos los Escobedo." Y ya con eso te ganan. Familiar, reconocible, real.
5. Historias reales. El padre pide enseñar más producto y Logan le sigue el rollo. Acaban los dos en cámara, hablando, enseñando un par de cosas y poco más. Y lo mejor: cuando intentan contar su día y terminan hablando de la familia, anécdotas y mil historias. Sin guion, sin poses. Solo verdad y buen rollo.

Antes de ir a hacer el verumt, apunta esto rápido:

• No intentes parecer una marca seria y perfecta. Mostrar el caos, lo humano y lo cotidiano genera conexión real.
• Enseña el proceso, no solo el resultado. El “detrás de cámaras” es contenido. Da igual si es el café del equipo o el jefe llegando en patinete: todo suma autenticidad.
• El CM es parte del show. Deja que la comunidad vea quién lleva las redes, que sienta que habla con alguien, no con “la marca”.
• Repite frases, gestos o estructuras que se vuelvan marca de la casa. Que te vean y digan: “ah, estos son los de las conservas”.
• Cuenta historias, no solo productos. Conecta emocionalmente antes de intentar vender. Primero engancha, luego ofreces.